La depravación sexual del periodista de Beto Ortiz

   

 

 

PERU.-(AGENCIALAVOZ) El periodista peruano conocido como “Beto Ortiz” se ha convertido desde la revocatoria de Lima un talibán para destruir honras y utilizar su sintonizado programa de noticia para hacer un activismo salvaje pro gay de forma extremista. Hoy este mismo personaje  está utilizando los medios  para confundir y presionar a los políticos que asisten a su programa para que el presidente de la república Ollanta Humala no firme la ley donde no figura la orientación sexual e identidad de género. Ortiz no solo ha atacado al reconocido pastor José Linares sino a los congresistas evangélicos y los que defienden el derecho y  la familia natural. Pero quien es ¿Beto Ortiz?,  aquí le reproducimos  una radiografía publicado por la revista Caretas. Además de un video donde Jaime Baily presenta las pruebas sobre las violaciones a menores.





Lucy Borja Flores, directora de la casa-hogar para niños Generación, no olvida a Beto Ortiz. En 1995 interpuso una denuncia penal contra el periodista por abuso sexual de menores (CARETAS 2145). Dos años después, cuando la Fiscalía archivó el caso, Ortiz, en represalia, realizó una serie de reportajes en Panorama, de Canal 5, afirmando que los niños de Generación estaban infectados con VIH, lo que originó una ola de demandas contra su directora. Borja, una mujer aguerrida, salió al frente de su institución y de los niños por los que había luchado durante toda su vida. En el 2005, la Municipalidad de Magdalena cerró el albergue. Borja recuerda que la clausura del centro de rehabilitación fue dirigida por Luciano López, entonces asesor legal de la comuna de Magdalena. Posteriormente, Ortiz contrató a López como su abogado en un proceso por difamación.

–¿En qué circunstancias conoce a Beto Ortiz?
–En 1993, Anel Townsend me propuso hacer un reportaje sobre los niños. A la semana siguiente, llega ese señor (Ortiz), se presenta y me propone lo mismo. Me insistió que le pase los contactos de los chicos que habían estado en Maranguita y se los di. A partir de allí vino el afán de hacer otro reportaje y otro...

–¿Y así se empezó a ganar su confianza?
–Sí. Un día llegó a mi oficina y vio que yo tenía a los chicos abrazados y él me dijo: “Yo también quiero que me abracen para la propaganda de Panorama”. Le dije: “no lo sé, ellos lo hacen porque yo soy su madre”. De tanta insistencia, y como ya lo conocía, le di permiso y se fue a grabar a la Plaza San Martín.

–¿Y cómo supo de los supuestos abusos sexuales?
–Ese día que él llevó a los niños a la Plaza San Martín se hizo tarde y no volvía. Logré ubicarlo y me dijo que estaba comprándoles ropa e invitándolos a comer por cuenta del canal 5. Me fui hasta la Plaza San Martín y allí uno de los chicos grandes me dijo “Lucy, ¿por qué le das tanto sajiro si él nos mañosea?”. Yo me quedé sorprendida y les dije “¿están seguros de lo que dicen?”, y me dijeron pregúntales a los demás. Yo me acerqué a donde él (Beto) y le dije: “No tengo pruebas, pero los chicos me están diciendo cosas horribles, así que por favor retírate”. Él no lo aceptó, pero los chicos le increparon y ahí me puse como una fiera y lo boté. Las víctimas eran niños de 11 a 16 años.

–¿Cuántos niños denunciaron a Beto Ortiz?
–Fueron varios chicos a declarar, pero por alguna extraña razón ya no les recibieron sus declaraciones. Imagino que todo esto es por la corrupción que había en ese entonces. El caso de ‘Danny’ es bien particular. Él era menor de 14 años, a lo que corresponden 25 años de cárcel. Danny era una pieza clave, antes de ir a denunciar sorprendentemente lo meten preso. Es bien raro lo que pasó.

–¿Cuál es la historia de ‘Danny’?
–Un día que fui con los niños a declarar a la Fiscalía, un policía me llama y me dice “quiero pedirle apoyo para un chico ‘Ronald’ (una de las supuestas víctimas de Ortiz)”, y yo le dije: “¿Ronald? ¿Qué es de su vida?”, yo no sabía nada de él. El policía me respondió “señora, él ha venido como declaración de la otra parte, pero su declaración ha sido tajante contra el periodista (Ortiz). El chico ha declarado que su hermano menor ‘Danny’ (en ese entonces de 12 años) también ha sido violado por el periodista”.

–¿Cuando el caso fue archivado empezó la represalia contra usted y Generación?
–Exacto. A unos chicos conocidos de él, que él mismo llevó a la casa, les dio la misión de que llamen a todos los chicos que puedan supuestamente por encargo mío para una grabación. La orden era que vayan al “hueco” (pampón a unas cuadras de la Plaza de Armas). Ahí los chicos aparecen con ketes de PBC en la boca y empieza a grabarlos. Increíblemente ese reportaje es premiado por la Unesco. ¡Imagínate! Los niños me contaron que él les había dado 50 soles a cada uno para grabarlos en ese estado. Muchos me decían: “Me rompió el hocico”, y yo no entendía, y era que nunca habían fumado nada. Me fui a la comisaría para denunciarlo, pero el comisario me dijo que como eran niños de la calle y como él trabajaba en Panorama era muy posible que el asunto quedara ahí.

–El Tribunal Constitucional falló a su favor, pero igual Generación fue clausurada.
–En el 2004, nosotros denunciamos a Francis Allison, que era alcalde de Magdalena, por abuso de autoridad. A partir de ahí, hubo un ensañamiento contra Generación y empieza una cruzada para cerrarnos la casa, lo que finalmente ocurre en el 2005. El asesor legal de la Municipalidad de Magdalena era Luciano López Flores. Él figura en todos los documentos como quien estuvo viendo el proceso legal para cerrarnos la casa. Sorprendentemente hace unos días leí unas declaraciones de Beto Ortiz con respecto a la demanda que le pondría a Jaime Bayly. Y ¡oh casualidad! Ortiz dijo que contrató a Luciano López Flores como su abogado contra Bayly.
–¿Considera que el caso contra Ortiz debería reabrirse?
–Obviamente. En otros países hay gente que ha sido procesada por hechos de abuso sexual ocurridos hace 50 años. Este caso no puede quedar impune. No hay nada más cruel que destrozar la moral de un niño. Este caso debe de ser un ejemplo de que el abuso de menores es sancionado con todo el peso de la Ley. (Óscar Valiente)